domingo, 27 de septiembre de 2009

El dinero (III)

¿Cuanto dinero hace falta en una economía? Este es un tema curioso, también lleno de malentendidos. Alguna gente tiende a pensar que hay tanto dinero como riqueza en el mundo, entendiendo riqueza como una monetarización de cualquier cosa susceptible de ser intercambiada. No hay que ser un genio para entender que la riqueza mundial es difícil de contabilizar, para empezar porque sus límites no están perfectamente claros: ¿es riqueza el medio ambiente? Cada vez se tiende a considerar más así, pero no por ello hay que aumentar la cantidad de dinero.

Una de las cosas que los teóricos de la Economía han entendido mejor, y que además tiene muy buen respaldo histórico, es que la cantidad de dinero en una economía estable depende del número y el valor de los intercambios que se hacen en una unidad de tiempo. Para entender esto, vamos a suponer una sociedad muy simple: hay una sola empresa donde todo individuo de la sociedad trabaja, y que lo que produce son latas de comida de gatos, único y exclusivo alimento básico de estos individuos (claro homenaje a District 9, cuya primera mitad recomiendo ver). Uno podría decir que directamente la empresa paga en latas, pero bueno, supongamos que en un momento dado se introdujo el dinero, y que la empresa paga en dinero, al mes. ¿Cuanto dinero hace falta? Pues si las necesidades de los individuos son de una lata al día, y esta vale un euro, cada individuo necesita al menos 30€ al mes para satisfacerlas. Si hay, digamos, 1000 individuos, necesitaremos 30.000€ de dinero circulando en un momento dado. Notar que a final de mes todo el dinero lo ha absorbido de nuevo la empresa, y que usará ese dinero para pagar a principios de mes a sus trabajadores. Este flujo simplificado tiene, sin embargo, muchas analogías con la realidad, y en Economía suele llamarse "doble flujo de la renta". Doble, porque por un lado los trabajadores ofrecen "trabajo" a cambio de "dinero", y por otro la empresa ofrece "latas" a cambio de "dinero". Toda economía real sigue, esencialmente, ese principio.

Podemos generalizar esto un poco introduciendo magnitudes macroeconómicas, que básicamente tratan de describir la economía en su conjunto. Si la oferta iguala a la demanda, y no interesa guardar en stock latas de comida para gatos, en nuestra economía se producirán tantas latas como sean demandadas, es decir, 30*1000 = 30.000 latas al mes. Traduciendo esto en dinero, tenemos una produccion mensual de 30.000€, pues cada lata vale un euro. Vamos a introducir una cantidad muy empleada en Economía, la "velocidad de circulación del dinero", que viene a ser, atrevíendome a introducir una ecuación:

V = producción en un determinado periodo (mes, año...) / Cantidad de dinero en circulación

La velocidad de circulación del dinero nos habla del número de veces que se emplea una unidad de dinero en el periodo de tiempo. En nuestra economía, es obvio que V = 1, dado que todo el dinero es repartido y absorbido mensualmente, y entonces cada unidad de dinero se usa para un único intercambio al mes, el de comprar la lata de comida de gato correspondiente. Supongamos, sin embargo, que ahora nuestra empresa paga una vez al día, 1 € por persona. ¿Cuánto dinero hace falta ahora? Pues obviamente 1000€. Sin embargo, ahora V = 30 al mes, es decir, que cada unidad de dinero es usada treinta veces al mes. Notar la correspondencia entre el flujo de "trabajo" y el flujo de "producción", que son los dos "productos" monetarizados de nuestra sociedad.

Ahora, despejando de nuestra ecuación, y si suponemos que la V = constante, tenemos una relación sencilla que nos da una idea de cuánto dinero hace falta en nuestra sociedad:

Cantidad de dinero = producción (mensual, anual,...)/número de intercambios dinero-renta

Antes de terminar, una vez más decir que estas expresiones están muy simplificadas, y que la realidad es más rica. En el mundo real, no todo el mundo tiene las mismas necesidades, así que podría ocurrir que algunos individuos ahorrasen su renta en lugar de gastarla en latas de comida de gatos. Ese dinero se detraería del doble flujo de la renta, pero podría volver a entrar si el individuo deposita el dinero en un banco, y este lo usa en inversión, etc... En la realidad, hay más productos que latas de comida para gatos, y otro uso de ese dinero extra podría ser comprar estos. Como vimos, además, la producción anual va cambiando en una economía real, y nuevos productos aparecen en el mercado, haciendo que los individuos quieran adquirirlos, para lo que necesitan de dinero. Y nada baladí es, además, el hecho de que la cantidad de dinero en circulación también puede cambiar: descubriendo nuevo oro, o porque el Banco Central decide emitir más, o porque aumentan los préstamos bancarios. Todo esto se traduce en más dependencias en nuestra ecuación simple, así como en una velocidad de circulación del dinero que no es constante.

Pero esos aspectos ya pertenecen más al que estudia Economía de forma seria. Para una primera aproximación al dinero, la lección aprendida aquí es más que suficiente: la cantidad de dinero en circulación idealmente depende de cuánto se produce y cuánto se intercambia. Cómo estas cosas cambian en el tiempo, así como el dinero en circulación, en próximas entradas trataré de ahondar en las distorsiones que en la práctica se generan. Para ello habrá que empezar a considerar otros tipos de dineros distintos al oro: el fiduciario y el bancario.